Vuelven los días de lluvia

Sevilla vuelve a tener un cielo gris o blanco, dependiendo de la hora. Sevilla vuelve a mojarse y a mojarnos. Los gorriones ya no se acercan al salón en busca de trocitos de pan, están escondidos en algún lugar y ni siquiera tienen ganas de piar. El parque está cerrado, no se pueden usar los columpios sin llenarse de barro hasta las rodillas.

Dentro, la tele no quiere funcionar y si lo hace no enseña nada de interes, las grandes ventanas hacen que el frío sea un huesped indeseado. En toda la casa no se escucha un ruido, ni siquiera el aleteo del pequeño mosquito que sigue viviendo con nosotras.He apilado varios libros para leer en días de lluvia y frío como el de hoy, pero ahora que los veo ninguno me atrae, no sé por qué los elegí.

Me gusta asomarme a ver como llueve pero el frío no invita y encender la estufa comienza a ser una gran idea. Al menos, me quedan pocos días de lluvia y frío sevillanos, en Cádiz, por suerte o por desgracia, cuando hace frío es mucho más soportable y no tienes la sensación de que si sales a la calle puedas cruzarte con unos cuantos pingüinos desorientados.